El paso de los años y la importancia del trabajo y la constancia

Este año es muy especial para nosotros, este año cumplimos 50 años.

Parece mentira, pero si, hemos cumplido medio siglo. ¿Quién nos iba a decir a nosotros que 50 años después seríamos referentes nacionales en nuestro sector? Los sueños no cumplen años, pero sí se hacen realidad.

A más edad, más felicidad, o eso dicen. Tendemos a pensar que la vejez es sinónimo de decadencia. Sin embargo, no todo son perdidas, también hay muchas ganancias: disfrutamos de los aprendizajes de la experiencia y del conocimiento que adquirimos.  

Esto no solo podemos aplicarlo al paso de los años en las personas, también lo podemos aplicar al paso de los años de las empresas. Todas pasan por momentos buenos y, por desgracia, por momentos que no lo son tanto. Conocemos esa sensación… Pero una cosa que está muy clara es que esas vivencias y esas experiencias hacen que podamos levantarnos y ser mucho más fuertes.

Nosotros así lo hemos hecho. Hemos construido, nos hemos caído, pero nos hemos levantado más fuertes que nunca. Motivados por seguir hacia delante, por crecer y por seguir con algo tan importante para una persona que esperaba con su más sincera ilusión que las cosas fueran bien.

Tenemos una cosa muy presente y es que todo nuestro éxito se debe a un conjunto de valores que hemos seguido con el paso de los años y que con el tiempo hemos ido mejorando y evolucionando, pero, sobre todo, se debe a un conjunto de personas que decidieron apostar por esto y trabajar por mejorar nuestra empresa y, otros, que creyeron en nosotros y nos ayudaron, confiando en nuestro trabajo. ¡Que gusto da cuando la gente confía en ti!

Por todos los que estuvieron, por los que están y por los que vendrán.

Gracias a todos por hacer que Maceflor cumpla esos 50 años.

Y recordad, quien no apuesta, no gana. Creed en vosotros mismos y haced que vuestros sueños se cumplan. ¡Los nuestros se están cumpliendo!


Leer más...